
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, llegó a México para una visita oficial marcada por una agenda estratégica que encabezará con la mandataria mexicana, Claudia Sheinbaum, en Palacio Nacional. Castro fue recibida con honores por el canciller Juan Ramón de la Fuente, en una señal del peso político que el Gobierno mexicano otorga a este encuentro, el segundo entre ambas mandatarias desde el inicio de la actual administración.
La reunión forma parte del renovado impulso diplomático que Sheinbaum ha dado a México en las últimas semanas, tras recibir recientemente al presidente de Francia, Emmanuel Macron. No se trata solo de ceremonias oficiales: según fuentes cercanas a la Presidencia, estas citas buscan avanzar en acuerdos concretos para atender problemáticas regionales que afectan de manera directa a ambos países.
El tema prioritario será la migración, un desafío que tanto México como Honduras afrontan bajo una fuerte presión por parte de la política migratoria de Estados Unidos. Ambos gobiernos coinciden en la necesidad de fortalecer la cooperación regional, no solo a través de mecanismos bilaterales, sino también en el marco de la CELAC, donde se discuten acciones para enfrentar las causas estructurales que detonan las caravanas migrantes.
Además de la agenda migratoria, se prevé que las mandatarias aborden proyectos de cooperación para el desarrollo, seguridad y fortalecimiento institucional. El Gobierno mexicano considera que la articulación con Centroamérica es esencial para construir una respuesta común a los flujos migratorios, mientras que Honduras busca profundizar una relación estratégica que contribuya a mejorar las condiciones económicas y sociales de su población.
