Marcial Campuzano
La presidenta de la Comisión de Defensa de Derechos Humanos (Coddehum) en el Estado Cecilia Narciso Gaytán, pidió a las poblaciones indígenas, de la Costa Chica y de otras partes del estado que no normalicen los matrimonios o las uniones tempranas entre menores de edad, porque se incurre en responsabilidades jurídicas porque se atenta contra el proyecto de vida y los derechos humanos de los adolescentes.
La defensora de los derechos humanos en Guerrero acudió este jueves a las instalaciones del Congreso del estado, para entregar su último informe de actividades al frente de ese organismo, que fue recibido por legisladores que integran la Comisión de Derechos Humanos con la presencia de otros diputados que sólo atestiguaron el cumplimiento del mandato constitucional.
En entrevista Narciso Gaytán habló sobre el compromiso que pactaron hace unos días, los padres de 2 menores de edad en la comunidad de Guamuchitos del municipio de Acapulco, para que más adelante formalicen en matrimonio, situación que fue severamente cuestionada y atendida por distintas dependencias del gobierno del estado, incluida la Procuraduría del Menor del DIF Guerrero.
La defensora de los derechos humanos dijo que al momento de que el organismo tuvo conocimiento de ese hecho, el delegado de la Comisión de Derechos Humanos establecido en Acapulco acudió a la localidad atendiendo el interés superior de las infancias.
También acudieron funcionarios del Sistema de Protección Integral de Niños, Niñas y Adolescentes (SIPINNA) del gobierno del estado y el procurador del Menor del DIF Guerrero, que de manera conjunta atendieron el tema.
Cecilia Narciso dio a conocer que el derecho de las infancias “es un derecho de ellos en el que no podemos decidir los adultos o los padres de familia”.
El argumento que expusieron los progenitores, es que los menores sólo fueron unidos para establecer un compromiso a largo plazo. Se les hizo saber que el proyecto de vida de los menores fue violentado, toda vez que por ser menores de edad no tienen capacidad para tomar decisiones para concretar uniones tempranas.
Ante este fenómeno social, Derechos Humanos tiene presencia en los municipios que integran las regiones Montaña y Costa Chica, para hacer conciencia entre la población que no deben violar los derechos de los niños y de las niñas.
Este fenómeno social no sólo es un tema que se da en La Montaña y en la Costa Chica, “es un tema de cultura y de responsabilidad desde los hogares que debe ser atendido desde ahí para erradicar ese tipo de violencia hacia las infancias”, señaló.
Consideró importante que los padres de familia sean orientados, que tengan acompañamiento y sean ayudarlos, para que el tema de las uniones tempranas entre menores de edad no se normalice, “porque se deben de garantizar los derechos de nuestras hijas y de nuestros hijos menores de edad”. Recordó que el Código Civil establece la edad propicia para contraer matrimonio.
Narciso Gaytán destacó que las autoridades están obligadas a promover la cultura del respeto a los derechos humanos, capacitar y darles asesoría jurídica a los padres de familia, “porque deben de saber que hay una responsabilidad jurídica y no deben de obligar a las infancias a contraer matrimonio o unirse de manera temprana para interrumpir un proyecto de vida de los menores de edad.
En otro tema informó que una de las acciones relevante realizadas por la Comisión de Defensa de Derechos Humanos, fue la atención a integrantes de colectivos diversos integrados por familiares de personas que están en calidad de desaparecidas, “como un deber de acompañarlas para que tengan justicia, derecho a la verdad y respeto a los derechos humanos”.
