
Ante las recientes discusiones en Europa sobre leyes que permiten el acceso gubernamental a las comunicaciones privadas, la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que México no implementará medidas similares.
Explicó que en caso de requerirse acceso a información personal o mensajes electrónicos, será obligatorio contar con la autorización de un juez, y si esta no se concede, no podrá realizarse la intervención.
Sheinbaum informó que el proyecto de la CURP Biométrica solo podrá ejecutarse con el consentimiento expreso de los ciudadanos. También aclaró que:
- La base de datos de números telefónicos permanecerá en manos de las empresas de mensajería, no del Gobierno.
- Cualquier uso de datos personales requerirá autorización judicial y de los titulares.
- El objetivo es garantizar transparencia y protección de la privacidad digital.
Con esto, el gobierno federal busca reforzar la confianza ciudadana en la gestión de información sensible.
