David Kershenobich, titular de la Secretaría de Salud, informó que los mexicanos consumen en promedio 166 litros de refresco al año, equivalentes a 15 cucharadas de azúcar diarias. Este consumo elevado se relaciona con 1 de cada 3 nuevos casos de diabetes y 1 de cada 7 de enfermedades cardiovasculares.
En 2024 se registraron 192 mil muertes por enfermedades cardiovasculares y 112 mil por diabetes. Incluso las bebidas “light” pueden aumentar el riesgo de infarto y hemorragia cerebral, además de afectar la microbiota intestinal.
Ante los altos niveles de consumo de bebidas azucaradas, el gobierno anunció una campaña masiva de concientización. Claudia Sheinbaum señaló que el problema no es la existencia de refrescos, sino su consumo excesivo. La campaña aún no tiene detalles sobre canales, duración o actividades en escuelas, pero busca reducir los riesgos de diabetes, obesidad y enfermedades cardiovasculares en la población.